
1. Tipos de pruebas diagnósticas para el covid-19
En el siguiente gráfico resumimos los diferentes “tests” que se aplican, según el caso, para diagnosticar el coronavirus.

Podemos distinguir dos grupos de pruebas:
- Detección de la presencia de virus en nuestro organismo. El objetivo es conocer si el coronavirus está presente en nuestras fosas nasales o nuestra garganta, en cuyo caso estaremos en riesgo tanto de sufrir síntomas como de contagiar la enfermedad.
- Detección de la respuesta inmunitaria de nuestro cuerpo ante el coronavirus. En este caso lo que buscamos es determinar si nuestro sistema inmunitario ha respondido ante la presencia del virus en nuestro cuerpo, lo cual ocurrirá unos días más tarde de que el coronavirus haya entrado en nuestro cuerpo.
Para determinar qué prueba debemos hacernos, en función principalmente del tiempo pasado desde nuestro posible contacto con el virus, recomendamos la lectura de las recomendaciones del laboratorio de Nosfarma para las pruebas PCR y test rápidos de antígenos COVID-19 en la zona de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes.
2. Aspectos básicos del ADN y el ARN
Vamos a empezar por lo más básico, los ácidos nucleicos. Estas moléculas se encargan de llevar toda la información codificante del ADN o ARN. El ADN está formado por una doble cadena de largas uniones de moléculas más simples, denominados nucleótidos o monómeros. Si lo extrapolamos a un mundo macroscópico, el ADN sería como un tren y los nucleótidos serían los vagones, uno detrás de otro. Un nucleótido presenta la siguiente estructura: una base nitrogenada, un azúcar (pentosa) y un grupo fosfato. Todos los nucleótidos se diferencian únicamente en su base nitrogenada: Adenina (A), Timina (T), Guanina (G) y Citosina (C). A su vez estas bases nitrogenadas se clasifican como: púricas (A y G) y pirimidínicas (T y C). La mezcla de estos cuatro nucleótidos forman el ADN.
El ADN tiene estructura de doble hélice donde una escalera helicoidal se encuentra unido a la otra escalera helicoidal a través de sus peldaños (bases nitrogenadas). Existe complementariedad entre los peldaños de cada escalera, por lo que, la adenina estará emparejada con timina y la guanina con la citosina.
En el caso del ARN, a diferencia del ADN, no presenta timina, lo sustituye otra base nitrogenada, el uracilo (U). También se diferencia en su estructura, el ARN normalmente es una molécula monocatenaria (una sola cadena).
3. Detección de la presencia del virus
La extracción del material codificante ADN o ARN es el primer paso para el análisis del material genético. Los primeros métodos de extracción de ADN utilizaban formol y cloroformo mientras que la extracción de ARN era mediante gradiente de cloruro de cesio y ultracentrifugación. En la actualidad, existen sistemas de automatización con mayor eficiencia de extracción y purificación.
La extracción del material genético (ácidos nucleicos) puede ser a partir de muestras sólidas (p. ej. tejido tumoral) o líquidas (sangre, líquido amniótico, saliva, EXUDADO NASOFARÍNGEO). A partir del exudado nasofaríngeo podemos obtener el material genético del virus SARS-CoV-19 para el diagnóstico de la COVID-19.
La extracción del virus RNA SARS-CoV-19 es muy sensible a enzimas que lo degradan (RNAsas) pero es más estable a la temperatura ambiente. Dichas enzimas vienen de manera intrínseca en la muestra nasofaríngea por lo que hay que inactivarlas con inhibidores de ARNsas.
Las dos estrategias de detección precoz de la COVID-19 validadas por el Ministerio de sanidad son: RT-PCR y la prueba de detección de anticuerpos (ELISA).
La PCR es una reacción de amplificación exponencial de una secuencia de ADN muy pequeñita hasta conseguir millones de copias de la misma secuencia. Kary Mullys desarrolló la técnica en 1985 y, desde entonces, la PCR se ha convertido en una revolución para el diagnóstico de enfermedades infecciosas, hereditarias y oncológicas.
La PCR es una herramienta útil para la detección del ARNm del virus SARS-CoV-2 por RT-PCR. Se emplea para el diagnóstico de la COVID-19 en las fases iniciales de la infección. En nuestro laboratorio Nosfarma obtendrá los resultados en solo 48 horas después de la toma de muestra nasofaríngea, no siendo necesario acudir en ayunas para la toma de muestra.
4. Descripción de la técnica PCR
La PCR (por sus siglas en inglés, polymerase chain reaction) consiste en aplicar entre 35 y 45 bucles de tres reacciones simples (desnaturalización, hibridación y elongación) que varían únicamente en la temperatura de incubación. Es una técnica de gran sensibilidad y especificidad, que requiere una mínima cantidad de ADN para el proceso de amplificación. La especificidad de la técnica viene marcada por el tipo de cebador (pequeña secuencia específica de la región de ADN de interés a partir de la cual la ADN polimerasa sintetiza la secuencia a amplificar). Este cebador o “primer” se va a unir al ADN molde en la etapa de hibridación (unión de las hebras de ADN), después de la desnaturalización (abertura de la doble hebra de ADN), para finalmente proceder con la fase de elongación del ADN.
Dado que el agente etiológico de la COVID-19 es un tipo de virus ARN monocatenario, es necesario previamente transformar el mRNA en el ADN complementario mediante la acción de la enzima transcriptasa inversa. Luego se hace una PCR convencional. RT-PCR permite detectar mRNA específico del SARS-COV-2 con una alta especificidad y resolución, por lo que un resultado positivo confirma la presencia del virus en la muestra del paciente. Por el contrario, si el resultado fuera negativo y se sospecha que el paciente presenta sintomatología asociada a la COVID-19, se deberá repetir la prueba para confirmar.
5. Pruebas serológicas
El Serodiagnóstico de la COVID-19 consiste en la detección de anticuerpos o inmuglobulinas antivirales (IgG/IgM) en sangre del paciente. Los anticuerpos son proteínas que fabrican nuestras células inmunitarias para reconocer y neutralizar agentes extraños (denominados antígenos) como virus, bacterias o toxinas.
La prueba de ELISA o ENZIMOINMUNOANALISIS permite identificar inmunocomplejos (unión antígeno-anticuerpo) mediante el uso de enzimas unidas al antígeno o al anticuerpo, estando uno de ellos fijado (absorbido) a un soporte sólido (placa). La reacción antígeno-anticuerpo se observa mediante una reacción enzimática que provoca un cambio de color cuya intensidad será proporcional a la cantidad de inmunocomplejos formados. La prueba de ELISA se encarga de detectar dichos anticuerpos por colorimetría, obteniéndose los siguientes resultados:
– IgM positiva -> Infección aguda de la enfermedad.
– IgG positiva -> Memoria inmunológica o a largo plazo. Infección pasada o latente.
La prueba de la ELISA es sensible y rápida. Si la IgM saliera positiva, se tendría que proceder a hacer la PCR. Para la prueba de la ELISA se extrae sangre del paciente y no hace falta venir en ayunas.
6. Test rápidos de anticuerpos y antígenos o proteínas
Son pruebas cualitativas (no cuantitativas) muy rápidas, aunque menos fiables, sensibles y específicas que la PCR y el ELISA.
A diferencia de la PCR, los test rápidos no detectan el ARN del virus, sino que utilizan métodos inmunocromatográficos en papel, es decir, una plataforma que lleva adherida las proteínas del virus para detectar anticuerpos o proteínas víricas frente a la COVID-19.
En Nosfarma utilizamos test rápidos BIOSYNEX, que presentan un 100% de coincidencia con el resultado de la PCR en casos positivos y un 97,5% de sensibilidad si el resultado es negativo, por lo que recomendamos su uso tanto en caso de que el paciente presente síntomas como si se encuentra entre los días 4 y 12 desde que tuvo el contacto estrecho sospechoso con un COVID positivo.
Christian Castillo – Farmacéutico especialista en genética